Porque a todos nos gusta que nos digan lo bien que nos encuentran, y nos pregunten si nos hemos hecho algo especial y alaben en general nuestro aspecto. Te traemos algunos consejos rápidos y muy fáciles para que puedas presumir de lo lindo en esa próxima quedada que tienes pendiente.
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Establece una rutina diaria de belleza diurna
El método, al final, es lo que funciona. De nada sirve que esporádicamente sigas tal o cual tratamiento. La continuidad es lo más importante para poder ver resultados a medio y a largo plazo. Muchas personas olvidan esto, y creen que con acordarse cada cierto tiempo es suficiente.
Pero no lo es. No tenemos que esperar a vernos arrugas para empezar a actuar, lo correcto es empezar desde antes de que nos notemos las primeras líneas de expresión. De la misma manera, no hay que dejar que el tiempo pase hasta que se nos abran las puntas. Lo lógico es acudir a la peluquería con regularidad para evitar que el cabello se nos estropee y tenga difícil solución.
Así que establece tu rutina diaria de belleza y sepárala en dos fases distintas: la fase que tienes que llevar a cabo nada más levantarte y la fase nocturna, justo antes de acostarte. La primera nos prepara correctamente para afrontar la jornada que tenemos por delante en perfectas condiciones.
Básicos de belleza y cuidados
La piel expulsa toxinas y grasas durante la noche, es su forma de depurarse. Por eso, el primero de los pasos consistirá en una limpieza que debe realizarse con un gel o jabón especial para rostros. Nunca te exfolies la piel por la mañana, pues esta podría quedar visiblemente irritada o enrojecida.
Es algo que puedes hacer en la ducha, mientras te lavas el cabello. Para saber cuál es el champú que más te conviene en tu caso particular, aquí encontraras una buena comparativa. No uses productos genéricos, sino que apuesta por los específicos para tus necesidades y condiciones capilares.
Después de la limpieza, aplícate un sérum especial para día. Déjalo actuar mientras desayunas o haces un poco de yoga, y a continuación, utiliza tu crema hidratante anti edad. Asegúrate de que lleve un buen filtro solar, ya que los rayos UV son extremadamente perjudiciales y pueden ocasionar manchas, envejecimiento prematuro, sequedad y otros muchos problemas cutáneos.
Cuando esté absorbida por completo, es el momento del maquillaje. Elije con mucho cuidado la base, lo ideal es que sea una fórmula tipo tratamiento, como si de una segunda crema de día se tratase. Las hay especiales para pieles grasas, secas, mixtas, sensibles, y con todo tipo de cobertura.
Presta especial atención al maquillaje que utilizas para tus ojos. Es una zona muy delicada, así que no pongas cualquier cosa ahí. Es preferible que la mayor parte de tu presupuesto lo dediques precisamente a la base y al maquillaje para ojos: máscara, sombras y delineador son importantes.
Nunca olvides la rutina de belleza nocturna
Por más pereza que te dé al llegar a casa, una buena rutina de belleza nunca jamás será completa, y ni siquiera efectiva, si te saltas la segunda fase. Es igualmente de importante como la primera, pero muchas personas se limitan a pasarse un algodón desmaquillante por la cara, y a veces ni eso.
Vamos a insistir muy mucho en la importancia de retirar el maquillaje que nos hemos aplicado por la mañana. El peor agravio que podemos hacer a nuestra piel es acostarnos sin limpiarnos la cara. El maquillaje es un producto de uso no continuado, y no eliminarlo adecuadamente puede congestionar la piel y llenarla de impurezas. Incluso podemos provocar una terrible infección.
Así que lo primero que tienes que hacer es usar una buena agua micelar junto con un desechable como el algodón, y retirar muy suavemente todo el producto. Una vez hayas terminado, pásate un tónico refrescante y acto seguido aplica tu sérum nocturno. Déjalo actuar al menos diez minutos.
Ultiliza las cremas correctas
Ahora sí. Es el momento de la crema nutritiva de noche, que también puede llevar activos anti edad, calmantes y relajantes. La noche es el mejor momento para que la piel absorba todas las propiedades beneficiosas de los productos que utilizamos, así que aprovecha bien la ocasión.
Lo mismo ocurre con la queratina de nuestro cabello. Por la noche está más receptiva y cuando mejor y más profundo efecto puede hacernos la mascarilla. Incluso puedes dejarla actuar mientras estás durmiendo y aclarar bien el pelo al despertar por la mañana. ¡Verás qué resultados!
Sabemos que te ha quedado muy claro: rutina dividida en dos partes complementarias y esenciales por igual, mañana y noche. Nunca saltarse ninguna de las dos, y ser muy constante. Los beneficios llegarán en muy pocas semanas, sin importar la edad y condición que tengas.