Los beneficios del aceite de coco eran desconocidos hasta hace poco por ser considerado una grasa saturada en casi un 90% de su composición. Sin embargo, estudios recientes han demostrado que este aceite no contiene las grasas saturadas habituales presentes en productos de origen animal, como carnes rojas y queso.
Las grasas contenidas en el aceite de coco, también están presentes en la leche materna y son llamadas triglicéridos o ácidos grasos de cadena media; por lo cual son altamente beneficiosos para el organismo; donde son metabolizados mediante un proceso diferente a como suele hacerlo con los ácidos grasos cuyo consumo es habitual.
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¿Cómo es metabolizado en el organismo?
Los ácidos grasos presentes en este aceite pasan directamente al hígado, donde son sintetizados y se utilizan como fuente de energía para el corazón o el cerebro; permitiendo poner en acción una de las propiedades del aceite de coco, como lo es sus efectos terapéuticos en el tratamiento de pacientes con epilepsia o Alzheimer.
Aceite de Coco en el tratamiento de padecimientos cerebrales
Sus efectos a nivel cerebral están siendo estudiados, y hasta los momentos se han comprobado sus beneficios en el tratamiento de pacientes con alzheimer; ya que su consumo permite proporcionar la energía al cerebro, que no puede ser obtenida mediante la glucosa. Sin embargo, en el cerebro este es solo uno de los beneficios del aceite de coco.
También contribuye a lograr una disminución en la frecuencia convulsiva de pacientes diagnosticados con epilepsia, sobre todo en niños. Se cree que ambos casos se deben a que su composición permite un aumento de los cuerpos cetónicos en sangre.
Otros beneficios
Entre otros de los beneficios del aceite de coco se pueden resaltar su contribución en la pérdida de peso corporal. Este oleo logra acelerar el gasto energético del organismo; por lo que al ser introducido en la dieta, solo con consumir de 15 a 30 gramos al día se logra acelerar el organismo en un 5%. También contribuye a la eliminación de la grasa abdominal que rodea órganos vitales, disminuyendo el riesgo de padecer graves enfermedades.
Además, su consumo contribuye en la reducción del apetito. Quien incorpora ácidos grasos de cadena media a su dieta termina ingiriendo menor número de calorías en sus comidas, lo cual a largo plazo influye positivamente en su índice de masa corporal.
Otra de las propiedades del aceite de coco, es su capacidad de matar patógenos como bacterias, virus u hongos. Casi la mitad de su composición total lo conforma el ácido laúrico, que al ser sintetizado por el organismo permite la formación de la monolaurina, cuya acción es efectiva combatiendo las principales fuentes de infección en el cuerpo humano.
Además de los beneficios del aceite de coco que ya hemos nombrado, se pude destacar que el individuo que consume un mayor porcentaje de calorías diarias las cuales son extraídas directamente de este fruto puede poseer un alto y formidable índice de salud, mostrando un registro casi inexistente de enfermedades cardiovasculares o Alzheimer.