La lisina, corresponde al nombre de un aminoácido, pero, ¿qué es un aminoácido? Bien, son moléculas orgánicas que conforman las llamadas proteínas. Se encargan, de los procesos de obtención de energía, reparación de tejidos, respiración y reproducción celular. Estos, están compuestos por los elementos esenciales que para la vida: oxigeno, carbono, nitrógeno e hidrógeno.
De allí, pueden clasificarse los aminoácidos entre esenciales, no esenciales y condicionales. La lisina, es uno de los 10 aminoácidos indispensables para la vida humana, es decir, del grupo esencial. Porque, no puede ser sintetizada por el organismo y debe ser obtenido mediante la ingesta de alimentos con lisina.
En este artículo, aprenderemos el papel que juega este importante compuesto orgánico para nuestras vidas. Incluyendo, los alimentos donde se encuentran y sus efectos en nuestro cuerpo.
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Funciones de la lisina en el cuerpo
Al ser un aminoácido esencial, conforma gran parte de las proteínas que consumimos. Por lo tanto, la lisina participa en los procesos de generación de colágeno, que alimenta los tejidos y cartílagos. También, afecta el sistema endocrino para hacer funcionar las hormonas responsables del crecimiento.
La lisina también favorece la generación de anticuerpos y el buen flujo de nitrógeno en el organismo. Pero, lo más importante, desde etapas tempranas, es que ayuda en el proceso de absorción de calcio. Por último, pero no menos importante, la lisina ayuda a la síntesis de otros compuestos que el organismo necesita para la obtención de energía, a nivel celular.
Alimentos con lisina
Anteriormente, mencionamos que la lisina solo puede sintetizarse mediante la ingesta de alimenta. Pues, acá te ofrecemos una lista de los alimentos que tienes en casa y ni pensaste que contenían este aminoácido:
Carnes rojas y blancas
La carne y órganos de res, de cordero y conejo, el pollo, el pescado como atún, sardinas y bacalao. Incluyendo, los camarones y las vieiras; puedes servirlos en sopas, como platos principales.
Frutas y vegetales
Naranjas, piñas, melones, remolachas, tomates, pepinos, mandarinas, manzanas, fresas, moras, sandías y bananas son algunas de alimentos con lisina. Incluyendo, el berro, la espinaca y la zanahoria.
Legumbres y frutos secos
Los garbanzos, lentejas, almendras, nueces, guisantes, la soya y la cebada son algunos alimentos que aportan este aminoácido.
Carbohidratos y cereales
Las papas, la pasta, el arroz, el trigo y el maíz son buenas fuentes de este compuesto orgánico.
Huevos y productos lácteos
Claro, no pueden faltar alimentos como el huevo, de gallina o codorniz, la leche, la nata, el yogur, la mantequilla y los quesos son muy altos en contenido de lisina.
Propiedades y beneficios
Por eso, los alimentos con lisina nos proporcionan muchos beneficios, he aquí una lista con los aportes que nos ofrece este aminoácido esencial:
Mejora la circulación
Al estar presente en diversos tipos de proteínas, muchas de estas, ayudan a la formación de glóbulos rojos y su correcto funcionamiento en el torrente sanguíneo. Además, de acelerar la absorción de azucares y lípidos que pueden estar almacenados en las arterias.
Favorece el rejuvenecimiento
La lisina está presente dentro de muchos alimentos que contienen antioxidantes como el beta-caroteno y la vitamina C. Este, es un importante estimulador de la regeneración celular. Además, ayuda a producir hormonas que mantienen hidratados los tejidos de la piel, cabello y mantiene fuerte el tono muscular y la densidad ósea.
Mejora la cicatrización
Al ayudar a producir colágeno y otros nutrientes que requiere nuestra piel, también mejora la coagulación de la sangre y la cicatrización de las heridas en el cuerpo. De hecho, ayuda a combatir las infecciones que pudieran traer, como hongos, irritación, abscesos o incluso herpes.
Refuerza el sistema inmune
Los alimentos con lisina ayudan a mejorar la producción de glóbulos blancos y mejora la transmisión de impulsos en el sistema nervioso. Permitiendo, regular la temperatura interna, estado de ánimo y además con beneficios en las actividades físicas sin presentar desajustes que permitan gripes, resfriados o infecciones.
Incrementa la eficiencia del metabolismo
Como se sintetiza en el organismo a través de la digestión, la lisina favorece la obtención de energía y mejora la regeneración de los tejidos del estómago y los intestinos. Adicionalmente, la lisina ayuda a mejorar el desecho de sustancias en exceso o toxinas almacenadas en el organismo.
Precauciones
La falta de niveles suficientes de lisina provoca debilidad, falta de concentración, mala absorción y aprovechamiento de nutrientes, así como cambios de humor. Sin embargo, altas dosis de este aminoácido pueden devenir en problemas gástricos u hormonales. Además, no debe consumirse si existe un padecimiento renal, hepático o se está en gestación.
Tener en cuenta todas estas cosas no hará disfrutar a plenitud el consumo de alimentos con lisina para nuestro bienestar. Además, estos alimentos los compramos y preparamos cada día, ahora, serás conscientes de lo que te llevas a la boca. Después de todo, somos lo que comemos.